Un gran escándalo sacude el mercado inmobiliario de Mumbai: los promotores de la reconocida empresa constructora Radius Sumer han sido detenidos tras una investigación exhaustiva llevada a cabo por la policía y las autoridades financieras. Según las autoridades, la compañía estaba detrás de un esquema masivo de fraude relacionado con la venta de apartamentos en complejos residenciales de lujo que nunca fueron terminados, e incluso, en algunos casos, ni siquiera iniciados.
Los daños estimados superan los 200 millones de euros y cientos de compradores e inversores han resultado afectados. El caso ha provocado una fuerte indignación pública y ha intensificado la presión sobre los organismos reguladores del sector.
El esquema de fraude
Radius Sumer se promocionaba como una promotora de confianza especializada en viviendas de lujo en zonas exclusivas de Mumbai, como Bandra, Chembur y Andheri. A los compradores se les prometían apartamentos premium, altos estándares de calidad y entrega puntual.
Sin embargo, las investigaciones revelaron que muchos proyectos no se completaron y algunos ni siquiera existían. Los fondos aportados por los compradores no se utilizaron para la construcción, sino que fueron desviados a empresas vinculadas, usados para cubrir deudas antiguas o destinados al enriquecimiento personal de los directivos.
Los investigadores detectaron un uso sistemático de informes falsos de avance de obra, permisos adulterados y una red de intermediarios que engañaban a los compradores mediante información falsa o incompleta.
Quejas y protestas
Las primeras señales de alarma aparecieron en 2022, cuando varios compradores comenzaron a denunciar retrasos constantes. Radius Sumer respondía con excusas como “problemas logísticos” o “pendientes de permisos”. No obstante, con el tiempo se descubrió que muchos de los proyectos carecían de los requisitos legales básicos.
Miles de familias de clase media, que habían invertido todos sus ahorros en estas propiedades, se quedaron sin vivienda y, en muchos casos, continuaron pagando hipotecas por inmuebles inexistentes.
La indignación creció en redes sociales, y se organizaron protestas espontáneas frente a las obras paralizadas. Las víctimas formaron grupos de acción y comenzaron a presentar denuncias masivas ante las autoridades.
Avances en la investigación
La investigación comenzó tras una denuncia colectiva presentada ante la Autoridad Reguladora de Bienes Raíces de Maharashtra (MahaRERA), que remitió el caso a la Unidad de Delitos Económicos. En los primeros meses de 2024, se detectaron múltiples irregularidades entre los documentos presentados por la empresa y el estado real de las obras.
Se descubrieron permisos falsificados y certificados de seguridad manipulados. En algunos casos, el mismo apartamento había sido vendido a más de un comprador. Esto generó un sistema tipo piramidal, en el que los pagos de nuevos clientes se utilizaban para cubrir compromisos anteriores.
Arrestos y confiscaciones
En mayo de 2025, el fundador de la empresa y su director financiero fueron arrestados, junto con varios abogados, intermediarios y contratistas implicados en el lavado de activos y otras actividades ilícitas.
Las autoridades congelaron cuentas bancarias y confiscaron activos valorados en alrededor de 1.800 millones de rupias (aproximadamente 20 millones de euros), incluyendo automóviles de lujo, terrenos y oficinas ubicadas en Mumbai y Pune.
Uno de los cofundadores logró salir de la India en 2023 y, según informes, se encuentra actualmente en Dubái. Se está evaluando su posible extradición.
Reacción del mercado y de los reguladores
El escándalo Radius Sumer ha dañado gravemente la confianza en el mercado inmobiliario residencial de Mumbai. El sector, ya afectado por el aumento de tasas de interés y la inflación, ahora enfrenta riesgos jurídicos y reputacionales adicionales.
MahaRERA ha anunciado medidas para reforzar los requisitos de licencia de los desarrolladores e implementar un seguro obligatorio para los depósitos de los compradores. También se evalúa la creación de un sistema electrónico de seguimiento de fondos destinados a obras.
Diversos bancos y entidades crediticias están revisando sus políticas de financiación, exigiendo documentación completa antes de aprobar fondos para proyectos en fases iniciales.
Opinión de los expertos
Los analistas señalan que esta situación fue posible debido a la falta de supervisión efectiva y a una baja educación financiera entre los compradores. Muchos firmaron contratos preliminares sin asesoramiento legal, lo que los hizo vulnerables al engaño.
Expertos anticorrupción proponen la creación de una autoridad independiente para proteger a los inversores inmobiliarios y la implementación obligatoria de cuentas escrow supervisadas para todos los nuevos desarrollos.
Perspectivas para las víctimas
Las familias afectadas esperan recuperar al menos parte de sus inversiones mediante la incautación de activos de los responsables. Sin embargo, expertos advierten que los procesos judiciales podrían tardar años y que no se garantiza una compensación total.
El gobierno del estado de Maharashtra ha anunciado su intención de crear un fondo de compensación para víctimas de fraudes inmobiliarios, aunque aún no se han detallado los mecanismos concretos.
Mientras tanto, organizaciones de la sociedad civil ofrecen asistencia legal gratuita y apoyo colectivo a los afectados.
Conclusión
El caso Radius Sumer es un ejemplo claro de los peligros de la falta de transparencia, supervisión y responsabilidad en el sector inmobiliario. Si bien los arrestos marcan un paso importante hacia la justicia, no bastan por sí solos.
Es urgente implementar reformas estructurales: cuentas escrow obligatorias, control digital de fondos, transparencia documental y asesoramiento legal independiente. Solo con estos mecanismos se podrá reconstruir la confianza en el mercado y proteger a los compradores honestos de futuras estafas.
