En 2025, las autoridades de la ciudad india de Noida han comenzado a actuar con firmeza para estabilizar la crisis del sector inmobiliario. Decenas de proyectos paralizados, años de retrasos en las entregas y una creciente frustración por parte de los compradores han llevado a la administración del distrito de Gautam Buddh Nagar a tomar medidas drásticas contra los promotores que han incumplido sus compromisos.
Alcance de la crisis
Según la Autoridad de Desarrollo de Noida (Noida Authority), la deuda total acumulada por los constructores supera los 360 mil millones de rupias (unos 4 mil millones de euros). Los pasivos se deben principalmente al impago de los cánones de arrendamiento de terrenos, impuestos atrasados y el incumplimiento de obligaciones relacionadas con la infraestructura urbana. Muchos proyectos iniciados en la década de 2010 siguen sin terminar.
Las zonas más afectadas incluyen los sectores 74–79, 107, 150 y Greater Noida West, donde numerosos complejos residenciales están detenidos. Se estima que más de 200.000 compradores siguen esperando la entrega de sus viviendas, muchos de ellos mientras continúan pagando hipotecas y alquiler.
Medidas por parte de las autoridades
A comienzos de 2025, el gobierno del estado de Uttar Pradesh, en colaboración con la Noida Authority y el Banco de Reserva de la India, elaboró una hoja de ruta para reestructurar las deudas y reactivar las construcciones paralizadas. Una de las principales medidas ha sido la cancelación de contratos de arrendamiento de terrenos a los constructores que llevan más de cinco años sin cumplir sus obligaciones.
Paralelamente, se inició un proceso para transferir estos proyectos problemáticos a nuevos promotores con buena reputación. Esta reatribución de derechos está condicionada a la finalización de las obras y al cumplimiento de todos los requisitos de urbanización.
Además, las autoridades han comenzado a publicar “listas negras” de empresas que han incumplido contratos, ocultado información sobre el avance de obras o no han presentado reportes financieros. Dichos promotores no podrán participar en nuevas licitaciones ni acceder a financiamiento institucional.
Protección a los compradores
Para defender los derechos de los compradores, la administración de Noida ha reforzado el Centro de Quejas, que ahora tramita reclamaciones de forma acelerada. También se han habilitado líneas telefónicas directas y una plataforma en línea que permite consultar el estado del proyecto, la documentación del promotor y el progreso financiero y técnico de las obras.
Como parte del programa nacional de apoyo al sector inmobiliario, el Banco de Reserva de la India ha recomendado a los bancos comerciales ofrecer opciones de refinanciación a los compradores afectados por los retrasos. Esta medida ha permitido que muchas familias no pierdan sus viviendas debido a la carga financiera combinada del alquiler y la hipoteca.
Participación del sector privado
Junto a las acciones estatales, varios fondos de inversión privados, incluidos internacionales, han comenzado a interesarse en la recuperación de los proyectos detenidos. Empresas como HDFC Capital Advisors y Brookfield están considerando adquirir derechos sobre estos desarrollos para completarlos y ponerlos en el mercado.
Esta posibilidad ha sido habilitada por nuevas disposiciones legales estatales que permiten a los inversores participar en la gestión de proyectos, siempre que asuman compromisos de responsabilidad social y respeten los derechos adquiridos de los compradores originales.
Resultados hasta la fecha
Hasta mayo de 2025, se han reactivado 28 proyectos anteriormente detenidos, mientras que otros 42 se encuentran en proceso de reasignación a nuevos constructores. En total, más de 35.000 viviendas han vuelto a fase activa de construcción.
Simultáneamente, ha aumentado el número de demandas judiciales contra promotores morosos y ya se han abierto varios procesos penales contra altos ejecutivos de empresas del sector.
Las autoridades informaron que desde principios de año se han recuperado más de 13 mil millones de rupias (alrededor de 145 millones de euros) en cánones de arrendamiento atrasados — la cifra más alta de los últimos cinco años.
Conclusión
La crisis del sector inmobiliario en Noida es el resultado de años de incumplimientos por parte de los constructores y de una falta de supervisión efectiva. Sin embargo, las medidas adoptadas en 2025 demuestran la determinación de las autoridades por restaurar la transparencia, la responsabilidad y la confianza en el mercado.
Si se implementan de forma coherente, estas iniciativas no solo permitirán resolver los problemas actuales, sino que también establecerán las bases para un desarrollo inmobiliario más sostenible y confiable en la región.